Muchos nos resistimos a realizarnos un examen médico por temor a recibir malas noticias o simplemente no le prestamos el interés debido, pero ¿te has preguntado cuán útil puede ser? Es momento de apartar prejuicios y temores. Cultivar la prevención es cuidarte y quererte más.
El chequeo médico preventivo es una sana costumbre que debemos cultivar. Más aún en estos tiempos de crisis. En condiciones normales cada persona debería acudir al médico internista, por lo menos, una vez al año y hacerse una revisión general. Este ciclo básico de supervisión médica sirve de control, para ratificar nuestro buen estado de salud. También para detectar afecciones que se manifiestan por primera vez o complicaciones de otras que ya se conocían. Además de la historia clínica y la exploración física, un diagnóstico general debe contar con estudios de laboratorio clínico básicos (perfil 20).
Entre las principales causas de diagnóstico de afecciones crónicas, está el no detectarlas a tiempo, y esto por no acudir a un chequeo médico anual de rutina.
Las mujeres, que son cabeza de familia, deben priorizar su salud y hacerse su chequeo médico preventivo. No deben seguir dejándose de últimas en la lista de prioridades. Esto también debe concientizarlo toda la familia y contribuir a que sus mujeres se cuiden, porque la prevención y el cuidado deben ser una responsabilidad compartida.
En Funcamama disponemos de consulta de Medicina Interna, Ginecología, Mastología Laboratorio Clínico, Imagenología y otras especialidades médicas para tu chequeo médico preventivo.
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